Wilfred & La Ganga

Una verdadera joya del ayer!!! Espero que lo disfruten!!!!

Sin inspiración divina!

Queridos lectores y colegas blogueros, no me siento muy ánimada en estos días para escribir... y la verdad que hacerlo sólo por hacerlo no tiene mucho sentido! Les pido disculpas! Ojalá me llegue pronto la inspiración divina...

Orange Metallic

Anoche por primera vez fui a una discoteca en Douala, Club Discoteque Orange Metallic, de la que había escuchado desveladas historias en las cuales nunca había sido yo la protagonista. Lo cierto es que anoche, era el último fin de semana en la ciudad de Gloria (Colombia) y Salvador (Francia), quienes se conocieron en Caracas años atrás y hoy dejan Camerún para una nueva expatriación en Marruecos, así que ellos, luego de una reunión que organizaron en lo que queda de su embalada casa, nos animaron a entregarnos al baile hasta la madrugada.

El escocés no fue, así que yo me aventuré con ellos, una pareja de venezolanos, dos franceses y un iraní.

La verdad el sitio no está mal, en cuanto a instalaciones es como cualquier discoteca en cualquier ciudad del mundo, sin muchas pretensiones, pero con música a todo volumen, luces, espejos, dos barras, una mesa de pool y sillones con mesitas bajas alrededor de la pista.

En realidad, lo que llamó más mi atención fue el público asistente, ya que tenía yo la idea de que me encontraría con jóvenes de ambos sexos de Douala, bailando y tomando como se hace en cualquier rincón del planeta. Pero no, lo que había, era una cantidad exorbitante de chicas, muy jovencitas, vestidas en extremo provocativas, con minifaldas, hot pants, microvestidos, sandalias y tacones, con unos cuerpazos espectaculares, obviamente sin las tetas operadas al mejor estilo de Venezuela, pero con pelucas de pelo largo y liso al mejor estilo de Camerún.

Estas niñas, que son en realidad lo opuesto, a la imagen que uno se hace de la mujer africana, si tomamos como referencia las mujeres trabajadoras que se ven en el día a día de la ciudad -cubiertas de pies a cabeza con el traje tradicional africano, o vestidas a la usanza ejecutiva de occidente- mostraban sus cuerpos sin desdén, a la vez que bailaban entre ellas y con su reflejo en los espejos. De pronto, en medio del espectáculo, podía verse un hombre blanco que bailaba extasiado entre tanta mujer bella y exótica.

No había ningún hombre africano, sólo dos que estaban sentados en una esquina donde siempre iban las muchachas a refrescarse o a descansar de vez en cuando, lo que me resultó en extremo sospechoso. ¡Dos hombres solos como con 10 chicas o más, que ni se inmutaban cuando estas seducían con su baile al hombre blanco, ujum... como rara la cosa! Sólo los mesoneros y porteros eran oriundos del país, siendo estos últimos, dos ejemplares de esos que podríamos llamar "murallas", pues en serio no había visto yo, hombres más papeados y gigantes que esos...

El resto del público estaba conformado por lo que yo he denominado como "la mafia libanesa", un grupo de hombres que se ven siempre juntos por los restaurantes y bares de Douala, que son los dueños de muchos de los negocios que hay aquí en Bonapriso, tales como los supermercados, las panaderías y las únicas dos fuentes de soda que hay en el vecindario.

Esta mafia, como suelen hacerlo siempre, estaba concentrada en diferentes rincones del lugar, en diversos grupos conformados solamente por integrantes masculinos, que se sientan a chupar alcohol con frenesí, aún cuando, al ser musulmanes lo tengan prohibido, y ni siquiera vendan bebidas alcohólicas en sus establecimientos.

La música estaba bien, nada del más allá, simplemente música bailable, uno que otro electro, típicas canciones pop y algo de hip hop, todo esto en inglés y francés. Tampoco pudo faltar un set de musiquita en español al ritmo de Shakira, Ricky Martin y el característico reguetón... los cuales por lo general no me gustan, pero con unos traguitos y en medio de Camerún confieso me emocionan.

La verdad fue interesante como experiencia, pero también algo decepcionante, pues esperaba encontrarme algo más que jovencitas cazando extranjeros, me preguntó entonces a dónde van los jóvenes de Douala.

Llegué a la casa a las 2.30 am, me vine con los venezolanos, pues ella está embarazada y no aguantaba más el humo del cigarro, los otros se quedaron allí... El escocés me esperaba despierto y preocupado luego de múltiples llamadas perdidas que retumbaban en el interior de mi cartera...

Aguacero

Son las 4.30 de la tarde en Douala... como típico viernes comienzan a oírse desde temprano los ruidos que expresan la alegría del final de la semana. Diferentes músicas vienen de distintos rincones, los barcitos en las calles comienzan a albergar hombres que se entregan al alcohol para aliviar sus penas, o para crear nuevas...

El domingo hay elecciones de diputados, y también habrá ley seca. Toda la semana pasaron diferentes caravanas con parlantes

haciendo campaña.

Los niños están de vacaciones, la mayoría de los expatriados se fueron ya a su país de origen, algunos se han quedado y los niños deambulan aburridos por sus casas buscando otro entretenimiento aparte de los juegos de video. Los chiquillos de Douala toman las calles para jugar fútbol, están alegres, la mayoría viste la camisa de Eto'o, el jugador numero 9 del Barcelona Fútbol Club, quien es orgullo nacional.

De pronto la lluvia hace estallido y los obliga a abandonar la partida. Todo se calma. El ambiente se refresca y se vuelve melancólico. Ahora solo se escuchan unos carros al pasar y el trinar de algunos pájaros que celebran la pronta escampada.

Poco a poco los niños van saliendo nuevamente de sus casas para reiniciar la partida.

¿Ahora Venezuela es de todos?

Leyendo en Internet sobre el panorama nacional, me encontré, no recuerdo en qué página, con esta imagen que realmente me afectó. Por eso decidí guardarla, pensando que alguna vez podría escribir sobre ella.

Lo primero que me vino a la mente fue Cuba, país que no conozco en su totalidad, pero en donde tuve oportunidad de pasar unos días, específicamente en su ciudad de La Habana. Único lugar del mundo, en el que, caminando tal cual turista pérdida buscando llegar a su famosa Plaza de La Revolución, fui interceptada por dos milicos armados que me pillaron bajo una palmera tratando de cubrirme de una fuerte tormenta que caía, y mientras hostilmente, me apuntaban con sus fúsiles, me pedían mi pasaporte a la vez que me interrogaban, indagando sobre las razones de mi visita al país amigo.

Todo esto me sirvió, para verificar a través de mi propia experiencia y con conocimiento de causa, que esta isla dista mucho de ser el mar de la felicidad. Por supuesto que hay gente que aún cree en la revolución, pero la mayoría de las personas con quienes tuve la oportunidad de conversar, cuando agarraron confianza, y tras verificar que no era yo una enviada de la “Revolución” en Venezuela, se destaparon y me hablaron sin pelos en la lengua sobre lo mal que se vive en Cuba y lo infelices que son bajo el régimen de Fidel.

La Habana, además de trasmitir nostalgia a través de sus hermosas edificaciones en ruinas, convertidas en ranchos con escaleras de mármol, está repleta de vallas, que junto al irónico rostro de Castro, hablan de lo magnífico de su revolución.

En los últimos años, han aparecido en el territorio nacional venezolano, numerosos carteles con estas características. Yo los encuentro terroríficos, pues paradójicamente, aunque acompañadas por aquel logo que reza que “Venezuela ahora es de todos”, la lectura que hago de ellas es “Venezuela ahora es de Chavéz”, y con Chavéz no manda el pueblo, esa es una de las mentiras más grandes que se ha creído nuestra gente, con Chavéz manda Chavéz y nadie más que él, y los beneficios, obtenidos de nuestro preciado oro negro, van para su bolsillo y los de su séquito de monigotes. Pues él, como esta foto lo indica, es el dueño y señor de Venezuela y todas sus riquezas. El peor de todos los caudillos que ha parido nuestra tierra, uno que se jacta la boca hablando de igualdad y libertades, incongruentemente, otra vez, mediante el lema: “Patria, Socialismo o Muerte”.

Marche Congo

Hoy fui a Marche Congo, este es un mercado alucinante cuya especialidad son las telas. El mercado es inmenso y es una explanada de tierra con muchos corredores en los que hay miles de tenderetes que venden todo tipo de telas. Y cuando digo todo tipo de telas es porque de verdad hay de todo: sedas, linos algodones, para cortinas, para tapizado, para sábanas, para disfraces, para ropa. La verdad es que se pueden pasar horas curioseando. Lo mejor de todo es que dentro del mercado también hay gente que cose y hace maravillas.

Yo fui buscando una tela para hacer un cubrecama. En una tienda en Akwa, vendían uno listo por 35.000 XFA, pero no combinaba para nada con mi cuarto, en donde hay baldosas azules. Así que pregunté si me podían hacer uno con una tela que me gustaba y me dijeron que sí. Para ello necesitaba comprarles la tela y pagarles 20.000 XFA por la hechura, tardándose unas dos semanas para hacer el trabajo.

Como buena venezolana que soy, siempre buscando el rebusque y la economía, pensé que mejor me iba al Marche Congo, en donde hay más variedad, para buscar el material. De vuelta a casa, ese mismo día, me detuve en el Marche de Fleur, que es otro mercado, pero de artesanías, que hay aquí en Bonapriso. Allí, le pregunté a una señora que me ha vendido algunos tejidos, si me podía hacer el famoso edredón acolchado, ella me lo hacía por 15.000 XFA más el material. Me pareció que no estaba mal, pues ya era algo menos. Así que le dije que iría a comprar la tela a mi gusto y se la llevaría. Ella se tardaría diez días en hacerlo.

En el Congo, adonde fui hoy aprovechando que no llovia y junto a dos venecas más, conseguí unas telas muy bonitas combinables entre sí a muy buen precio, compré todo el material para un edredón reversible y dos fundas por 10.000, y también encontré una señora que me lo hará por 10.000 más. Hoy es martes y lo tendrá listo para el sábado, pero yo le dije que pasaré a recogerlo el lunes. Como ven me ahorre unos cobritos, pasé una tarde entretenida viendo telas hermosas y me conseguí tremenda costurera.

También hablé español con el muchacho del puesto donde compré la tela, y es que aquí en Douala hay mucha gente que aprendió español en la escuela, y cuando nos escuchan hablar les encanta practicar. Cuando les digo que vengo de Venezuela se ponen muy contentos, porque generalmente nunca han tenido contacto con un suramericano. También el caso común, adivinen qué… me dicen Hugo Chavéz!!! Y bueno normalmente me tomo el tiempo para hablar con ellos sobre el presidente. Generalmente lo admiran porque se mete con Bush, esa es su única razón, y normalmente yo les contesto que a mí también eso me gusta de él, pero es una de las pocas cosas que le admiro, y que aunque eso le da mucha proyección internacional, debería más bien ocuparse de los problemas del país y no estarse haciendo famoso a costillas de su guerra antiimperialista. También les explico que todo eso no es más que una farsa mediática, ya que en el fondo Chavéz no puede vivir sin Bush, porque es el primerito que nos compra el petróleo, y que a la hora del té, puede decir lo que le da la gana, pero sabe que sin él se las vería apretadito!

Pero volviendo al mercado, al otro lado de la calle que lo atraviesa, están los pasillos de mercería. Allí venden encajes, botones, hilos, agujas, cintas y etiquetas de marca. El detalle de las etiquetas es muy pintoresco, pues aquí se hace la ropa y uno elige la marca que le quiere poner. Las costureras y sastres son excelentes, copian exactamente cualquier prenda, así sea un blue jean, cuya tela también venden en el Congo.

Yo aún no he mandado hacer nada porque no he tenido una ocasión que lo amerite y siempre digo que me voy a mandar a hacer vestidos y faldas, pero la verdad es que mi espíritu consumista no se ha manifestado, sin embargo he visto ropa que se han mandado hacer otras personas y sin duda el resultado es excelente.

THE THINKING BLOGGER AWARD

MUY APRECIADOS LECTORES

He tenido la honra de ser premiada con el THINKING BLOGGER AWARD de manos de Gaby en su blog Arrepentida... Jamás!! ....

Me siento muy halagada por el hecho de formar parte en su lista de ganadores!

Ahora es parte de mi compromiso con el premio, otorgar el mismo a cinco compañeros cuya lectura me haga reflexionar, no es una tarea fácil, pues todo aquello que leo en los blogs me lleva a pensar sobre otros asuntos... pero bueno... hay que seguir las reglas del juego... así que...

ta ta ta tannnnn... ta ta ta tannnnnn.......

AND THE WINNERS ARE....

1. BAAKANIT con sus Plátanos Baratos cuya lectura es capaz de saciar los apetitos más voraces.


2. HORACIO y su blog Uno con Todo Un rico perro caliente, de esos que se zampa uno a las 4 am en una noche loca caraqueña, y en el que se identifican miles de sabores que alivian la borrachera.


3. CEREZA y su blog Impulsos y Sentidos por hacerme reir y recordar la esencia del venezolano, a través de sus relatos cargados de sexualidad y humor... sin duda estamos reflejados en sus líneas.


4. DIEGO y su blog Saparapanda que nos ofrece en sus escritos diversas reflexiones sobre el quehacer cultural en el país y el mundo en general, así como otros asuntos de interés para todos.


5. TRIMARDITO quien a través de No Me la Calo nos comenta un sinfín de variedades que tienen lugar no sólo en Venezuela, sino en América Latina y el resto del mundo.

Espero que disfruten su premio! No hay cheque, ni reales de por medio! Es algo simbólico, así que no empiecen a cuestionarse qué a dónde tengo que ir, que si me pueden hacer una transferencia, que si le dejé un poder a mi mamá y ella puede ir a cobrar por mi!!! Porque plata... No HAY!!!

FELICITACIONES!!!

Ahora si ganastes debes seguir las reglas del juego:
1. Si fuiste uno de los premiados, escribe un post e incluye en él 5 blogs que te hacen pensar, (con enlace, link, a cada uno de ellos para que puedan ser visitados.
2. Haz en tu post un link al post de Ilker para que se pueda encontrar el origen de este premio.
3.Muestra con orgullo el "Thinking Blogger Award" con un link al post que tu escribiste. Como alternativa, puedes elegir color dorado o plateado, según decidas conforme al diseño de tu blog.

Singui

Singui es mi fiel compañera. La adopté al mes de mi llegada a Camerún. Su nombre quiere decir "gato" en Douala.

Aunque supuestamente nació en abril de 2004 y ya es una gata adulta, es pequeñita, parece una miniatura, yo le llamo la gata pigmeo, y es que casí parece uno de esos "bonsay kitten" de la leyenda que circulaba por internet.

Cuando llegó a la casa estaba muy flaca, y su pelo era áspero como papel de lija. Ahora está recuperada, su pelo es suave y aunque no es gorda, tiene algunas acumulaciones de grasa, pero siempre manteniendo la línea! Es muy amorosa, sólo estuvo escondida medio día cuando la trajimos y después no pudo contenerse y salió a mostrarnos su cariño.

Le faltan algunos dientes, incluído un colmillo, por eso la llamamos "Singui One Tooth" o también Singui BB (bad breath) porque a veces tiene mal aliento. También le decimos Singui Mingui, que quiere decir "Smelly Cat" o gata hedionda!

Le encanta que la concientan, es tan mimada que se pone patas arriba para que le rasquen la barriga. Le gusta mucho la leche, el yogurt, el helado de vainilla y todo lo que tenga crema. Pero, por malcriada, ya no come nada más sino croquetas para gato, porque no quería comer sino puras cosas ricas y cuando le ponía su alimento, lo olía, me miraba y se iba como diciéndome que yo estaba muy equivocada si pensaba que ella iba a comer eso.

Aunque se porta muy bien, a veces hace de las suyas, como hacer sus necesidades en las plantas, aunque tiene un cuarto completo para ella donde se encuentra su baño. Hoy la regañé durísimo, porque como hicé carne mechada, antes de hacerla y luego de hervir la carne, la dejé en la olla esperando que se enfriará. Cuál es mi sorpresa cuando voy a la cocina, Singui con un tremendo pedazo de carne que se robó!!!

Originalmente habla francés, pero luego aprendió inglés por una dueña inglesa que tuvo. Ahora, tras leerse completico el diccionario francés-español, aprendió también nuestra lengua. Lo malo es que el diccionario, tiene un huequito en cada una de sus páginas, hechos por Singui con su uña mientras avanzaba en su lectura.

AUROVILLE

Un amigo me comentó sobre su deseo de vivir en Auroville, una ciudad universal, diseñada con el fin de que seres provenientes de todas partes del mundo vivan en paz “más allá de rivalidades nacionales, de convenciones sociales, de morales contradictorias y de religiones enfrentadas”.

Cuando iniciamos nuestra conversación, pensé por un momento en una típica comunidad hippie al sur de la India, una secta New Age que pretende, mediante el aislamiento, salvar el futuro de la humanidad. Tan utópico me pareció el lugar, que me puse a investigar sobre él. Y tal como se describe en su sitio web, Auroville es un lugar comprometido, en la investigación y la práctica, con las futuras necesidades culturales, medioambientales, sociales y espirituales de la humanidad.

En su definición, Auroville, habla de sí misma como un espacio global, en el que hay cabida para ciudadanos de todo el mundo sin importar su credo, raza o posición social, aspirando a la creación de una sociedad sustentable, obteniendo el máximo provecho de los recursos naturales de forma que se obtengan beneficios para los habitantes del presente y se garanticen los mismos para las generaciones futuras.

Dada esa auto descripción, pensé que se trataba de una sociedad ecológica, donde cada quien tendría el derecho de pensar a su manera, sin que esto interfiera en el desarrollo prospero de la comunidad. Pero indagando un poco más, me encontré con los principios básicos de la ciudad, en donde leí lo siguiente: Auroville es para aquellos que quieren vivir una vida esencialmente divina pero que renuncian a cualquier tipo de religión, sea esta antigua, moderna, nueva o futura. Aquí no hay religión. Reemplazamos la religión por la vida espiritual, pues ésta es mucho más verdadera, más profunda y más alta; es decir, más cercana al Divino. El Divino esta en todo y en cada cosa, pero no somos conscientes de ello. Este es el inmenso progreso que los hombres deben hacer.

Cuando se habla de suprimir religiones y cultos, pienso entonces en una nueva forma social en la que lo primordial sería crear una sociedad que funcionara en perfecta armonía entre el hombre y el medio ambiente. Pero luego, conceptos como "El Divino", me hacen pensar que, Auroville es un sitio repleto de realidades paradójicas, y que como toda utopía, no es fiel a su definición en la práctica. ¿Acaso cuando hablamos de una fuerza divina, un poder celestial, o de cualquier ser supraterrenal, como la fuerza motora de todo cuanto existe, no estamos creando un culto o religión? Además en el fondo, al menos en la teoría, todas las religiones, a través de la fe en alguna divinidad, buscan alcanzar el bienestar de la raza humana y el entendimiento de la misma con el medio ámbiente, que es al igual que él, una creación divina.

Luego descubrí que todos los ciudadanos de Auroville deben practicar lo que han denominado como “yoga integral” con fin de meditar por el bien de la humanidad. ¿Podría alguien que se negara a formar parte de estas actividades vivir en Auroville? Probablemente la respuesta sería negativa, pues la yoga integral forma parte de los fundamentos de la comunidad, y si entras en ella y pretendes formar parte de la misma, debes actuar según sus reglas y esquemas de pensamiento, por lo tanto, no creo, que aunque los aurovillanos se denominen como a sí mismos como una “sociedad universal” sean verdaderamente una sociedad tolerante.

Auroville se especializa en el uso de tecnologías energéticas sostenibles, y en sus tierras sólo se genera energía a través de plantas solares, eólicas e hidroeléctricas. En sus suelos sólo hay granjas ecológicas que buscan abastecer las necesidades básicas de la población local, así com oexportan algunos de sus productos. Sin embargo, todavía necesitan adquirir algunos bienes en el exterior de la ciudad.

Todo esto me parece muy positivo, y realmente si hablo de tolerancia, no debería yo opinar que siento cierta falta de la misma por parte de los ciudadanos de Auroville. Finalmente, cada quien escoge el estilo de vida que más le convenza y convenga, pero en lo personal, opino que podemos ser seres sustentables, sin aislarnos del resto del mundo y asumir soluciones tan radicales.

Quizás es tan utópico como Auroville, pensar que llegará el día en que los seres humanos aceptemos el librepensamiento. Sin embargo, más allá de las ideologías políticas y religiosas existentes, si todos asumiésemos simples posturas “amigables” en un plano ecológico, podríamos hacer de este, un mundo mejor. Cambios tan simples como caminar, reciclar, consumir productos orgánicos, generar menos basura, ahorrar electricidad y educar a nuestros hijos de modo que inculquemos en ellos una mayor conciencia frente a los problemas que el supuesto progreso de la humanidad ha suscitado en la Tierra, son detalles que en la práctica cotidiana se traducirían en bienestar universal. Al fin y al cabo, la tierra, sin importar cuál Dios la creó, es de todos por igual.

Douala en cifras

Muchos me han preguntado sobre el costo de la vida en Douala, y la verdad es que esta es una ciudad en extremo costosa, principalmente porque la mayoría de los bienes son importados, incluidos algunos, como la leche, que para la cultura occidental son de primera necesidad. Los vegetales y frutas tienen un precio más asequible, pues en Camerún hay buenos suelos y quienes los cultivan, de modo que se producen alimentos suficientes para abastecer el mercado local y proveer a otros países como Guinea Ecuatorial. Sin embargo, pese a que son baratos en comparación a otros bienes, si se toma en cuenta el salario promedio de la gente y el poder adquisitivo que este les permite, son bastante costosos*. También depende de dónde se adquieran estos productos, siendo lo más aconsejable comprarlos en la calle y de preferencia en el centro o en los mercados, donde no son tan caros como los puestos en las zonas residenciales.

Yo generalmente voy hasta Akwa que es lo que se entiende como el centro de la ciudad, aunque no lo sea fisicamente. Trato de ir siempre allí, pues al haber sido introducida por una ciudadana de Douala, la “madame” siempre me da los precios locales y no tengo que discutir con nadie porque al ser extranjera crean que soy millonaria. A veces he ido al mercado central, pero la experiencia, aunque divertida, es agotadora. Primero no es común ver blancos por allí, y cuando uno va no puede pasar desapercibido; al ritmo de cada paso recorrido se escucha a la gente decir: “la blanche, la blanche”, y te agarran y jalan como si fueras un ser del más allá. Además de eso, las veces que he ido, he llegado a mi casa sin voz de tanto regatear y pelear el precio justo, tal como cuando compro cerca de mi casa, en donde me quieren cobrar 1000 XFA por medio kilo de mango que yo sé cuesta 300 XFA.

En general, si voy a comprar vegetales, gasto entre 4000 y 5000 XFA, Digamos que 1OOO XFA equivalen a 1 £, y que está a su vez equivale a 4.360 Bs. -según la tasa oficial de cambio- que en el mercado negro equivaldría al doble. Es decir, que oficialmente, con aproximadamente 25000 Bs. puedo hacer una compra que incluye un kilo de papas (300 XFA), medio cartón o plato de huevos (15 unidades por 2000 XFA), una piña (de 300 a 500 XFA dependiendo del tamaño), un kilo de papaya (3 pequeñas por 300 XFA), lechuga, cebolla, tomate, cebollín, toronjas, cilantro, plátano, berenjena o calabacines. También compró allí el arroz y algunos granos, que venden por medida y mucho más económicos que en el automercado. Por ese monto hacemos una compra variada que puede durar de una a dos semanas, dependiendo de nuestra ingesta de vegetales. Vale la pena contarles que las frutas en Camerún son deliciosas y tienen más sabor y son más dulces que las que haya probado en ningún otro lado.

En el supermercado adquiero otros productos como enlatados, quesos, leche, pasta y cereales. La pasta varia en precios, una fabricada aquí, muy buena, cuesta 500 XFA medio kilo, mientras que se puede conseguir una importada de Italia a más de 2000 XFA por la misma cantidad. Un litro de leche varia entre 850 y 1100 XFA, dependiendo de la marca y en dónde se compre. El café, el mejor de los que he probado en mi vida, 100% granos arábica, cuesta 1200 la bolsita de 250 grs. Los quesos se consiguen a partir de 6500 XFA por kilo, siendo por lo general el más barato el Emmental. En los supermercados y pequeños establecimientos los productos son carísimos, pero se consigue de todo, y también depende de a cuál se vaya. Trato siempre de ir a Mahima, uno hindú que queda en el centro y que ofrece mejores precios que los que quedan cerca en Bonapriso que son Score, ABZ y Gooddies, siendo estos últimos, también panadería y cafetería.

El pan es bueno y económico, una canilla o baguette cuesta 150 XFA, un paquete de pan de pita con cinco panes cuesta 600 XFA, hay panecillos diversos y croissants cuyo precio varía entre 100 y 500 XFA. En Score importan pan, y venden un paquete de pan de sándwich a 5500 XFA o uno de pan de hamburguesa con tres panes a 2200, lo cual me parece una exageración, y, por ende, un precio que nunca pagaría, sobretodo si se produce localmente pan bueno y fresco a precios asequibles, pero si los traen, es porque debe haber quien los pague, tal como el caso de los yogures Danone que compiten con los fabricados localmente, muy buenos también, a un precio de 5500 por 4 unidades contra 350 el potecito de yogurt local.

Los precios de la carne también varian, y es igualmente más barata en los mercados que en los supermercados o carnicerías. Como en todos lados, es más cara si se pide limpia y cortada. Yo voy al otro lado de la ciudad, al negocio de un francés que queda en Deido, la Butcherie du Littoral, cuyos productos son excelentes y a un precio mucho más competitivo que los establecimientos cercanos, pero algo más costosa que en los mercados. Sin embargo, allí la preparan como me gusta y estoy acostumbrada. Una compra variada de carne para dos personas para dos semanas que incluya pollo, carne de res (cebú) y cochino, puede variar entre los 18.000 y 25.000 XFA dependiendo de lo que se compre y los cortes que se elijan.

Los cosméticos y productos de limpieza tienen un alto costo. Un desodorante cuesta entre 2500 y 3500 XFA. Un pote de shampoo entre 1900 y 3500. Un paquete de Ariel para lavar la ropa puede llegar a costar 7000 XFA y un pote de insecticida 2500.

El tema habitacional también varía según el tipo de vivienda. Aquí hay casas grandes con piscina que según me han dicho cuestan entre 2 y 4 millones de XFA al mes, pero tengo una amiga que vive en una casa de una planta con un pequeño jardín al frente que cuesta 400.000. He visto apartamentos en edificios con piscina y ascensor que van desde 600.000 a 900.000 XFA. Yo vivo en uno que cuesta 350.000, es cómodo para dos personas, con dos habitaciones, dos baños completos y uno pequeño para las visitas, sala, cocina y comedor. No tiene piscina, ni jardín, ni ascensor, pero está bien ubicado en una zona residencial tranquila.

Los carros son extremadamente costosos. Un buen carro usado 4x4 con algunos años de uso como una Pajero, Land Rover o Rav 4, pueden costar entre 6 y 10 millones de XFA, dependiendo del año y estado del mismo. Un Toyota Starlet cuesta 1.5 millones. Nosotros pagamos por una vieja Susuki Vitara con catorce años de antigüedad, 3.5 millones de XFA, es costosa para lo que es, pero al fin y al cabo es todo terreno y buena para las calles de Douala, incluida la nuestra que no es asfaltada.

La gasolina cuesta un ojo de la cara, sobretodo luego que se viene de un lugar como Venezuela, donde absurdamente es más barata que el agua. Para llenar el tanque de la Vitara se invierten 10000 XFA semanales y está se utiliza únicamente para ir de la casa al trabajo diariamente, es decir, dos viajes al día de lunes a sábado. El transporte público, mayormente taxis o moto taxis, cuesta 200 francos por asiento en el taxi y 150 la moto, sin importar donde los tomes y donde te bajes . Si se quiere un taxi para uno solo, este costará 1500 francos, y puede a veces negociarse una carrera por 1000 si no se va muy lejos. También se pueden pagar 2000 y acordar con el chofer que te lleve a tu destino, te espere y te maneje de regreso a casa, si se va a estar en un sitio alrededor de una hora.

Una bombona de gas para cocinar cuesta 6000 francos, a mi me dura de tres a cuatro meses. La electricidad varia dependiendo de la época del año. En la temporada seca y de calor podemos gastar entre 50000 y 80000 XFA tratando de prender el aire acondicionado sólo para dormir. En la temporada de lluvia pagamos alrededor de 30000, ya que se puede dormir sin climatización. La factura del agua, es normalmente de 5000 XFA por mes.

El gimnasio al que voy cuesta 25000 francos y puedo ir todos los días de lunes a domingo a cualquier hora del día, no es lujoso ni tiene aire acondicionado, pero, el supuestamente más elegante, cuesta el doble y tampoco tiene. Internet cuesta 25.000 XFA al mes, siendo lo más costoso la instalación del servicio que incluye una antena y un modem.

La vida en Douala puede llegar a ser muy cara. Como en toda ciudad cada quien administra el dinero como puede. Cada quien establece sus propias necesidades y el cómo satisfacerlas, pero en general, para tener una vida cómoda y sin grandes lujos se podría gastar entre 800000 y 1000000 XFA dependiendo de cuánto se asigne al entretenimiento, obviamente esto dependerá del estilo de vida al que se esté acostumbrado, pero digamos que me refiero al que puede llevar una familia perteneciente a la clase media en América Latina, que incluye tres comidas balanceadas al día, una salida de vez en cuando y servicios tales como teléfono, Internet, electricidad, agua, etc. Comer en un restaurante es un lujo, y no necesariamente se come mejor que en casa, tomar una cerveza en un bar cuesta 2000 francos, mientras que en cualquier rinconcito en la calle cuesta 650, así que dependiendo de cómo va el presupuesto se la toma uno con aire, en la calle al ritmo de makossa o sino en la casa.

Aquí se consigue de todo y se puede hacer casi de todo, muchas veces hay que pagar precios muy altos, pero de vez en cuando si se necesita matar un antojo uno lo hace con los ojos cerrados. También hay sitios en la calle muy ricos en los que se puede comer pollo a la parrilla con papas fritas por 4000 XFA, excelente opción si se quiere salir de casa, comer rico y a un precio razonable. Como decimos los venezolanos bueno, bonito y barato!

* Un profesor en una escuela gana entre 180000 y 200000 XFA. Un chofer privado alrededor de 50000 XFA. Un vigilante entre 30 y 50000.

Sin título...

Este fin de semana estuve en Kribi, la pasé muy bien en compañía de mi escocés y de los seres que he aprendido a querer en este lado del mundo. Me prepararon entre todos unos días muy sabrosos. Me hizo falta la familia en Venezuela, debo reconocer que hubo en mí cierto aire melancólico. Pero me gustó mucho salir de Douala, ir a Kribi y pasar mi cumpleaños junto al mar. Tomé estas fotos, para dos panitas blogueros.

Un atardecer en Kribi para Sol

Una iguana playera para Dabart, ¿o debería decir lagartija...?

Gracias a todos, los que están cerca y los que están lejos, por acordarse de mí y mandarme sus buenos deseos.

Mercaderes de Douala (II Parte)

Para mí Douala es una muestra más de las grandes contradicciones que podemos encontrar en una ciudad como Caracas, un lugar repleto de contrastes, siendo los más evidentes los suscitados entre la riqueza extrema y la pobreza crítica.

En Douala hay muchísimo dinero, y por lo general la gente que lo tiene se hace sentir, conviertiéndose en exponentes de algo así como un "nuevoriquismo desenfrenado", en el que se ven carros Mercedes Benz último modelo, las mejores camionetas -he visto al menos una de las famosas Hummer-, o un New Beatle, el cual he visto varias veces y me ha hecho cuestionarme el cómo es posible andar en una ciudad como esta, cuyas calles están repletas de huecos, en un carro como ese, especialmente durante la temporada de lluvia cuando el problema es aún mayor, ya que como las calles están por lo general inundadas, nunca se sabe que tan profundo son los huecos.

Si generalizamos, se podría decir que en Douala se respira pobreza, pero de pronto pueden verse cosas que hablan de ese pequeñísimo grupo con dinero, y lo mal distribuido del mismo. Sin ser exagerada, aquí he visto la casa más grande, no necesariamente más bonita, que he visto en mi vida; tan grande es, que tiene una piscina que parece una fuente en relación al tamaño total de la casa. Cuando veo esa casa, pienso que la misma es una grosería, si consideramos que la mayoría de las casas son pequeñas y con lo que nosotros llamamos techos de zinc.

Cuando pienso en Douala, los colores que vienen a mi mente son marrón y gris, imagino que los mismos remiten a sus muchas calles de tierra, la humedad en sus muros y los techos oxidados. Sin embargo, Douala puede ser también una exploción de color, que se hace sentir en los estampados de las telas en los trajes de la gente, el amarillo de los taxis y en miles de detalles desplegados a lo largo de la ciudad.

Douala, tiene también olores y sonidos. Los aromas que mejor identifico con la ciudad son el olor a quemado que viene de las muchas parrillas y ventas de brochetas en la calle, y un olor a lluvia que trae consigo inundaciones, pero también borra la tierra que normalmente flota en el ambiente.

Los sonidos, como en Caracas, son incontables pájaros temprano en la mañana, martilleos, motores de carro, gente que grita, mujeres que lavan la ropa al amanecer y el sonido que emana cuando con sus manos frotan el jabón, niños jugando futbol en las calles, cornetas y ritmos africanos.

La música más popular es la "Makossa", un ritmo que vendría siendo el suplente del reguetón en las calles caraqueñas, aunque aquí de vez en cuando también suena un reguetón, pues éste es definitivamente una plaga, y de él, al parecer, no hay rincón del mundo que se salve.

Quería mostrarles estas dos imágenes de Douala con un poco más de la ciudad, tenía días averiguando como colocar un reproductor de mp3 dentro de una entrada y leí por allí sobre GoEar y ODEO.

Por alguna razón me incliné por la segunda opción, pero no me resultó. Gracias a un post de Sol indagué un poco más en la primera opción y me resultó más sencilla, lo único es que por alguna razón los reproductores están deshabilitados temporalmente.

Tal como hizo la chica de Toscana, si hacen click aquí pueden escuchar una "Makossa". Esta es la típica que se escucha en todos lados, no sé de qué trata porque está cantada en Douala, el idioma local, pero el título indica algo sobre el amor!

Espero que la disfruten y les de una idea más amplia de cómo es la ciudad.

Cuando un libro se acaba...

Cuando un libro se acaba deja en mí una sensación de vacío muy diferente a la que me queda cuando termino de ver una película.

La película, obviamente también nos hace pensar mientras la vemos y nos invita a la reflexión cuando se acaba. Pero la relación que establecemos con el libro es diferente. El libro, más allá de lo que contiene, nos permite relacionarnos con él de una manera objetual. Lo cargamos de un lado para el otro, nos permite movernos con él, lo llevamos a la cama o a la playa, nos acompaña en el metro o mientras esperamos ser atendidos en el dentista. Sin importar donde, al libro desde que lo comenzamos hasta que llegamos a su fin, le dedicamos unos minutos o unas horas cada día...

Cuando de pronto nos percatamos que se acerca el final, tratamos de administrar esas últimas páginas para que podamos tener más días con él, o bien lo devoramos con desespero para descubrir finalmente en qué acabara esa historia que nos ha atrapado durante días.

Además el libro nos permite desafiar nuestra imaginación, cuando lo leemos tenemos el derecho de construir sus paísajes, los rostros, las voces y hasta las miradas de sus personajes. En la película todo esta hecho y no nos queda más que aceptar la realidad tal como se nos presenta. Nada más decepcionante que ver una película basada en algún libro que hemos leído y ver que los protagónistas no se parecen en nada a los que recreamos en nuestra mente.

Hoy terminé El mundo de Sofia (1995), del autor noruego Jostein Gaarder. Este libro, en el que el autor nos cuenta la historia de la filosofía desde la antigüedad hasta nuestros días, lo compré una vez para mi padre, el libro era novedad y había llamado mi atención, sabía que luego que él lo leyera yo podría leerlo también y así lo intenté. Como muchos otros libros, lo comencé y nunca lo terminé, pues debo reconocer que tengo esa mala costumbre de tener diferentes libros a lado de mi cama y empezar varios a la vez de modo que no termino ninguno.

Al venir a Camerún hicé una pequeña selección de libros en español, pues sabía que iba a tener mucho tiempo para la lectura. Trajé conmigo El mundo de Sofía, lo tomé de la casa paterna junto con otros volúmenes que sabía que disfrutaría. Cuando lo empecé, noté que tenía un marcalibros en la página 43, lo abandoné casí al comienzo.

Esta vez lo leí entusiasmada, era divertido y emocionante releer de una forma sencilla todos los conceptos que aprendí en la universidad, ya que la historia nos habla del tema a través de un hombre llamado Alberto Knox, quien prepara un curso de filosofía para Sofía, una joven que recién cumple quince años. Sin embargo Sofía y Alberto, son a su vez personajes de ficción creados por Albert Knag, padre de Hilde, quien cumple también quince años, y que, ausente en una misión de las Naciones Unidas en el Líbano, escribe a su hija este libro donde pretende invitarla a reflexionar y asumir una postura crítica frente al mundo en que vivimos.

El libro me gustó mucho, porque además de que el tema me resulta de por sí interesante, me recordó a mi papá y todo lo que de él he aprendido, ya sea de él directamente, o bien porque me brindó la oportunidad de acercarme al mundo sin apatía.

Aún tengo conmigo esa sensación que me dejó y que estoy segura pasara poco a poco.

Qué hacia hace... *

Diez años: Ya había terminado el colegio, pero todavía estaba en la Universidad, exactamente en la UCV, estudiando la hermosa carrera de Artes, que aunque bella no paga! Vivía con mi papá y tenía un novio de la UCAB que estudiaba letras. Nunca me pasó por la mente que acabaría viviendo en Camerún.

Cinco años: Trabajaba en una conocida galería de arte contemporáneo a la que renuncié por estas fechas para irme a estudiar un postgrado en Barcelona. En ese entonces tampoco me pasaba por la cabeza que algún día estaría viviendo en Camerún.

Un año: Acababa de dejar mi último trabajo para dedicarme a organizar mi mudanza a Camerún. En esos días me la pasaba vaciando closets, haciendo cajas, mudando cosas a casa de mis padres y dejando mi legado regado por cuanto maletero y depósito familiar estuviera disponible. Vi los juegos Inglaterra – Portugal y Brasil – Francia en la copa del mundo! Ya sabía que vendría a Camerún, pero no tenía la más mínima idea de cómo sería!

Ayer: Tuve el típico domingo aburrido y triste. Día nublado, encerrada en casa. Leí muchas páginas de mi libro El mundo de Sofía que trata sobre la historia de la filosofía, leí el períodico venezolano en línea, incluyendo el horóscopo de Adriana Azzis! Cené pasta con leche y queso crema como cuando era chiquita y me acosté a dormir. Un pinche záncudo ladilla de esos que vuelan en la oreja interrumpió mi sueño! Vacié medio pote de “baygon” y luego de 20 minutos me fui a dormir otra vez.

Hoy: Fui a la carnicería al otro lado de la ciudad en la mañana, compré, entre varias cosas, una carne para preparar carne mechada, ya que el próximo lunes es mi cumpleaños y quiero invitar a mis amigos el domingo a comer un desayuno criollo. Voy a seguir leyendo mi libro a ver si lo termino!

y Ustedes? que hacían hace 10, 5, 1 año, ayer y hoy?

*Este meme me lo paso dabart, y tal cual hizo él, se lo asigno a los 3 primeros que comenten a este post! Si es que alguien quiere hablar un poquito de sí mismo!

PS. Esto debí haberlo posteado ayer, pero se fue la luz y por tanto también mi conexión a Internet... es decir que ayer es en realidad anteayer y hoy es ayer!

Mercaderes

Lo imaginable e inimaginable pudiera ser encontrado en las congestionadas calles y mercados de Douala.

Innumerables carretillas pasean la ciudad cargadas de los más variados productos.

Los marchantes, logran mantener el equilibrio en medio de una ciudad tan caótica y desequilibrada, portando en sus cabezas grandes platos, cestas o montones, de cualquier cosa vendible.

Una mujer ofrece en su andar unas naranjas. En su gran plato, no lleva solo la fruta sin pelar, sino también naranjas peladas, que, con un afilado cuchillo, va pelando de forma perfecta mientras camina y lanza las conchas en ese mismo platón que lleva en su cabeza.

Lo que para mí es una proeza de alta pericia, para el entorno no es más que parte de su cotidianidad y pasa desapercibido.